Un hombre, una limusina, un día: con Cosmópolis, David Cronenberg tomó uno de sus desafíos más difíciles hasta la fecha. El cuento de un hombre conduciendo a través de las calles de Manhattan con la intención de conseguir un corte de pelo de su barbero favorito es, difícilmente, la clase de material que habría hecho emocionarse a la mayoría de los directores. Pero no a Cronenberg, su gusto por los supuestos 'ingrabables' ha brillado otra vez y ha convertido a Cosmópolis en una película fascinante.
Cosmópolis, como habrás deducido, es la historia de un hombre, ese hombre es Eric Packer, interpretado por Robert Pattinson, que se convierte en la mejor interpretación de su joven carrera con una distancia considerable. Packer es un hombre de negocios de 28 años que está por todos sus intentos y propósitos en la parte más alta de su juego, un Dios de su propio universo. A lo largo del transcurso del día, vemos a varias personas saltar dentro de la limusina de Packer, su doctor va para un examen de próstata completo, su guardaespaldas va con la línea ocasional de las malas noticias, su asesor financiero, sus amantes, y la lista sigue.
La película podría ser sobre un día cualquiera en la vida de Packer, pero es un día lleno de eventos, Packer conduce a través de Manhattan en medio de las protestas que ocupan Wall Street que hacen de él el blanco de vandalismo y asaltos. En una escena donde la limusina de Packer es atacada y destrozada, Packer y el resto de la limusina parecen no estar para nada desconcertados con el incidente. Surrealista y fascinante, Cronenberg ha creado un mundo que se siente apocalíptico, donde sólo la limusina es un lugar seguro para Packer.
La película sale a flote gracias a algunas actuaciones fantásticas; Pattinson finalmente ha hundido sus pezuñas en un papel, mientras Paul Giamatti está fantástico como un ex-empleado de Packer en una escena final increíblemente tenda. Sarah Gadon también encaja como la extraña mujer de Packer, donde, a lo largo de la película, ellos comparten un número de reuniones extrañas e incómodas, que parece tener de poco en ningún momento.
Cronenberg ha creado un trabajo de belleza postmodernista pura. No es un camino fácil, pero es el que debería ser tomado ciertamente. Una de mis películas favoritas del año. Puntuación: ****
No hay comentarios:
Publicar un comentario