*Atención: Algunas de las reviews contienen spoilers de la película*
Telegraph (5 estrellas)
Mi reacción instantánea, después de salir dando tumbos, con la boca abierta, del cine, fue una necesidad patológica de volver a entrar dando tumbos. Hay tanto en esta olla en ebullición de una película, tantas neurosis de la industria del cine expuestas y horrores anidados con otros horrores, que solo verla una vez es demasiado, y ni de cerca suficiente. Cronenberg ha hecho una película que quieres desver - y luego verla y desverla otra vez.
The Guardian (4 estrellas)
Maps to the Stars es una película tensa y escalofriante, nada saludable en como agarra al público. Quizás, al final, es demasiado extravagantemente cínica para ser totalmente veraz sobre Hollywood y LA, pero tiene un poder Jacobino, la clase de cosa que John Webster o Thomas Middleton y William Rowley podrían haber escrito si vivieran en el siglo 21: una pesadilla claustrofóbica de desesperación.
Maps To The Stars es una película que tiene mucha diversión con la noción de las dinastias de Hollywood y los procesos con los que el éxito es conseguido y cimentado - quién conoce a quién, quién está viendo a quién, quién odia a quién: todas las conexiones invisibles, intrazables que unen a Hollywood. El chiste es que no hay mapa para estas estrellas, y sin un innato sentido de la dirección, te perderás pronto. Hollywood a menudo es desacreditado como incestuoso, y esta película juega con esa idea hasta el tope, con el producto del alimento incestuoso incluso más problemático y egoista que la generación previa.
Fiel a su estilo, Maps to the Stars de David Cronenberg es un trabajo de fusión cinéfila. Como la húmeda vagina escondidad debajo de la axila de Marylin Burns, aquí tenemos una investigación vigorizantemente indiferente a unos tabús familiares innombrables que han sido forzadamente integrados al cuerpo de una nociva (y no completamente convincente) burlesque La La Land. No hay lineas mordaces o empujones irónicos aquí - hay un Jeremias punk que te pone la cara en la caraculo constipada de Hollywood. La emoción de ver la película viene del intento de localizar los debilitados nervios donde estos dos lados extraños convergen - o, como la película diría, encontrar "la brisa que dice si".
El poder bruto de Julianne Moore está a la vista, pero la actuación de Blanche DuBois parece igualmente forjada. Mia Wasikowska y Robert Pattinson están perfectamente bien. El recién llegado Evan Bird puede soltar "capullo Judio" como está escrito en la página y verse tonto cuando es requerido, pero su vena se encuentra más como un acosador escolar que como un niño actor verdaderamente demoníaco.
Su entrada en Cannes, "Maps to the Stars", devuelve de alguna forma al territorio Cronenberg explorado en "Dead Ringers", y es probablemente la mejor película del director en, al menos, una década. Aquí, trabajando con la talentosa sátira literaria de la cultura de Hollywood, Bruce Wagner, Cronenberg ha dado un paso de gigante de una gran manera. Él borda nuestra cultura obsesionada con los famosos, y la enfermedad que crea, directa al paredón.
(...) Cusack es apropiadamente horripilante como el padre, y Williams es sólido. Decir nada más de ellos es realmente spoilear las cosas. Robert Pattinson tiene un papel pequeño, pero tiene una escena de sexo, por supuesto, para satisfacer a sus fans. Pattinson y Cronenberg están desarrollando una bonita colaboración, sin embargo, y aquí esperamos que podamos ver más de los dos.
Al director también le ha sido regalado un cast que rompe para el material. Antes de que pregunteis: no, Robert Pattinson no sale tanto (su papel podría ser eliminado de la película sin demasiados problemas), pero sí, es bastante bueno en ella. Además puedes verle en una versión glam-rock de Khan de "Star Trek", así que ahí está. El papel de Olivia Williams también está similarmente suscrito, pero ella encuentra una nueva textura a la clase de mujer de hielo que ella ya ha interpretado antes.
(...) Pero en el todo, la película es enfermamente disfrutable revolcándose en el lado escandaloso y jodido del mundo del espectáculo, y una vuelta real a sus formas para el director. Si no hace nada más, te quitará cualquier deseo de ir a un tour de las estrellas a la verdadera LA, y solo eso es algo por lo que estar agradecido.
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